La verdad.esDecepción en la familia de la víctima al conocer que el autor de su muerte en el polígono industrial Base 2000 no será condenado a más de 15 años
La familia de José Carlos Cánovas, el joven de 19 años que fue asesinado a navajazos en el polígono Base 2000 en abril de 2007, no encontró ayer alivio a su dolor en la condena impuesta por un jurado popular a su autor: Ramón Utreras Salgado. El Gemelo deberá cumplir pena por un delito de homicidio al que, además, el juez podría aplicar las atenuantes de arrebato y de ingesta de alcohol y drogas. A la espera de ver cómo influyen estas consideraciones, este joven, de 22 años, no será condenado a más de quince años de prisión.
El jurado popular consideró ayer, en su veredicto, probado por unanimidad que el acusado acuchilló a José Carlos, al que no conocía, después de que éste se viese implicado en un pelea con la ex novia del homicida. Una de las puñaladas alcanzó al corazón de la víctima y fue «mortal de necesidad», tal y como explicaron los forenses, mientras que la segunda le afectó al hígado. Todos los integrantes coincidieron también al señalar que el acusado abandonó el lugar en un coche, ayudado por terceras personas que no han sido identificadas, y tapándose la cabeza con una capucha.
Con el voto de seis de los nueve miembros del jurado se consiguió dar por probado que Ramón Utreras había ingerido aquella noche alcohol y sustancias estupefacientes que le habían afectado «ligeramente». El acusado declaró, en la primera jornada del juicio, que la noche del crimen había bebido 25 copas y había esnifado entre 4 y 5 gramos de cocaína.
Con siete votos a favor, se consideró probado que éste cometió el crimen con «una pérdida del control de sus impulsos» porque actuó así después de que una antigua novia le avisara de que en el exterior del local varias personas golpeaban a un amigo suyo.
Por otra parte, en Alcantarilla se celebra esta semana un torneo de billar en homenaje a la víctima, muy aficionado a este juego. La familia asistirá el domingo.
El jurado popular consideró ayer, en su veredicto, probado por unanimidad que el acusado acuchilló a José Carlos, al que no conocía, después de que éste se viese implicado en un pelea con la ex novia del homicida. Una de las puñaladas alcanzó al corazón de la víctima y fue «mortal de necesidad», tal y como explicaron los forenses, mientras que la segunda le afectó al hígado. Todos los integrantes coincidieron también al señalar que el acusado abandonó el lugar en un coche, ayudado por terceras personas que no han sido identificadas, y tapándose la cabeza con una capucha.
Con el voto de seis de los nueve miembros del jurado se consiguió dar por probado que Ramón Utreras había ingerido aquella noche alcohol y sustancias estupefacientes que le habían afectado «ligeramente». El acusado declaró, en la primera jornada del juicio, que la noche del crimen había bebido 25 copas y había esnifado entre 4 y 5 gramos de cocaína.
Con siete votos a favor, se consideró probado que éste cometió el crimen con «una pérdida del control de sus impulsos» porque actuó así después de que una antigua novia le avisara de que en el exterior del local varias personas golpeaban a un amigo suyo.
Por otra parte, en Alcantarilla se celebra esta semana un torneo de billar en homenaje a la víctima, muy aficionado a este juego. La familia asistirá el domingo.
Nota:En la foto vemos a Ramón Utreras Salgado "El Gemelo.
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