Fuente: EFE
Ecologistas en Acción de la Región de Murcia solicitó ha solicitado un comunicado a las autoridades regionales que se cumpla la sanción de 42.000 euros que la Consejería de Agricultura y Agua impuso a las empresas CESPA y STV Gestión y que se repongan los daños causados en Ulea.
Según esta asociación, la sanción impuesta por la consejería a estas empresas de debe a "la mala gestión" de la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos de Ulea, y por "el incumplimiento en varios puntos" de la Declaración de Impacto Ambiental.
Así mismo, aseguraron que las denuncias que esta organización hizo al respecto en 2006 originaron una investigación por parte del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil y del Servicio de Vigilancia e Inspección Ambiental de la Consejería, que "destaparon varias infracciones graves".
Según los ecologistas, la infracción más grave es "la mala gestión de los lixiviados del vertedero, por el grave riesgo que supone para el medio ambiente".
La organización aseguró que la balsa de lixiviados de la planta está totalmente llena "y se ha llenado, incluso, la balsa de pluviales, prevista para emergencias en caso de lluvia".
Entre las infracciones e incumplimientos de la Declaración de Impacto Ambiental, la asociación destacó la acumulación de residuos tratados y sin tratar en una zona destinada sólo al afino del compost, y la constatación de que algunos camiones han cargado residuos sin tratar con destino al vertedero de Cañada Hermosa.
Según esta asociación, la sanción impuesta por la consejería a estas empresas de debe a "la mala gestión" de la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos de Ulea, y por "el incumplimiento en varios puntos" de la Declaración de Impacto Ambiental.
Así mismo, aseguraron que las denuncias que esta organización hizo al respecto en 2006 originaron una investigación por parte del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil y del Servicio de Vigilancia e Inspección Ambiental de la Consejería, que "destaparon varias infracciones graves".
Según los ecologistas, la infracción más grave es "la mala gestión de los lixiviados del vertedero, por el grave riesgo que supone para el medio ambiente".
La organización aseguró que la balsa de lixiviados de la planta está totalmente llena "y se ha llenado, incluso, la balsa de pluviales, prevista para emergencias en caso de lluvia".
Entre las infracciones e incumplimientos de la Declaración de Impacto Ambiental, la asociación destacó la acumulación de residuos tratados y sin tratar en una zona destinada sólo al afino del compost, y la constatación de que algunos camiones han cargado residuos sin tratar con destino al vertedero de Cañada Hermosa.
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