Los ecologistas denuncian que el proyecto de declaración de Patrimonio de la Humanidad es «un engaño», y acusan de plagio a la Fundación que agrupa a los alcaldes de la comarca
«Si esto fuera un viaje a la luna, estaríamos construyendo el cohete». El cineasta Chumilla Carbajosa utilizó esta semana esta metáfora para explicar la decisión de la Fundación Valle de Ricote, que él preside, de solicitar a la Unesco que declare a la comarca Patrimonio de la Humanidad. Los alcaldes de los municipios de la zona -todos ellos del PP- y el presidente Valcárcel arroparon la presentación del proyecto, que alcanzó una gran repercusión mediática. Pero la foto no ha gustado a todos. Grupos ecologistas y vecinales de estas localidades, agrupados en la Asociación para la Defensa del Valle de Ricote, creen que el cohete que prepara la Fundación no llegará a la luna, sino que se quedará en un viaje a ninguna parte. Acusan a los alcaldes de «plagiar» sus ideas y de organizar una operación que es «un engaño».
Las relaciones entre la Fundación y la Asociación para la Defensa del Valle de Ricote siempre han sido malas. En la Fundación se integran los alcaldes y cuenta con el apoyo de la Comunidad Autónoma. En la asociación se agrupan los grupos ecologistas y de izquierdas. En medio de la trifulca, el cineasta Chumilla Carbajosa, que terminó convirtiéndose en la cabeza visible de la plataforma oficial no sin recibir por ello una lluvia de críticas. El último paso de la Fundación, el impulso para la declaración de Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco, ha vuelto a desatar la polémica. Los ecologistas exigen a los alcaldes y al Gobierno regional que, «si de verdad pretenden salvar el Valle», elaboren un Plan Especial de Paisaje Cultural. También piden «que los ayuntamientos que han permitido en su planeamiento la urbanización y construcción en las huertas tradicionales» suspendan este desarrollo urbanístico y «den órdenes para la demolición» de urbanizaciones como La Morra, en Villanueva del Segura.
Las relaciones entre la Fundación y la Asociación para la Defensa del Valle de Ricote siempre han sido malas. En la Fundación se integran los alcaldes y cuenta con el apoyo de la Comunidad Autónoma. En la asociación se agrupan los grupos ecologistas y de izquierdas. En medio de la trifulca, el cineasta Chumilla Carbajosa, que terminó convirtiéndose en la cabeza visible de la plataforma oficial no sin recibir por ello una lluvia de críticas. El último paso de la Fundación, el impulso para la declaración de Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco, ha vuelto a desatar la polémica. Los ecologistas exigen a los alcaldes y al Gobierno regional que, «si de verdad pretenden salvar el Valle», elaboren un Plan Especial de Paisaje Cultural. También piden «que los ayuntamientos que han permitido en su planeamiento la urbanización y construcción en las huertas tradicionales» suspendan este desarrollo urbanístico y «den órdenes para la demolición» de urbanizaciones como La Morra, en Villanueva del Segura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario