El director general de Carreteras, José Guijarro, visitó hoy junto al alcalde de Ricote, Miguel Candel, las obras que la Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio está realizando en la RM-521, entre Ricote y Ojós. Esta actuación, según Guijarro, “supondrá una gran mejora para ambas poblaciones”.
La carretera RM-521 comunica Ricote con la carretera RM-520, integrada en el corredor de la Vega Media a su paso por Cieza, Abarán, Blanca, Ojós, Villanueva, Archena, Ceutí y Alguazas por lo que “las obras redundarán en la mejora de las comunicaciones de los habitantes de estos municipios”, añadió Guijarro.
La Dirección General de Carreteras ampliará el radio de varias curvas de esta vía para aumentar su seguridad y reducir el índice de siniestralidad, además se reforzará el firme y se colocarán nuevas señales verticales y horizontales, así como barreras de protección para motoristas. Guijarro explicó que “se trata de ensanchar la plataforma actual y mejorar la seguridad vial en sus curvas”.
De este modo, los casi 600.000 vehículos que circulan al año por esta vía, situada en pleno corazón del Valle de Ricote, disfrutarán de un trazado que repercutirá en la protección del manantial de ‘Las Pilicas’.
Para ello, la empresa adjudicataria cuenta con un presupuesto de 424.321 euros con el objetivo de “aumentar la seguridad del trayecto y reducir el tiempo de los desplazamientos, de tal forma que el trayecto sea más cómo para todos los usuarios”, añadió el director general.
La carretera RM-521 comunica Ricote con la carretera RM-520, integrada en el corredor de la Vega Media a su paso por Cieza, Abarán, Blanca, Ojós, Villanueva, Archena, Ceutí y Alguazas por lo que “las obras redundarán en la mejora de las comunicaciones de los habitantes de estos municipios”, añadió Guijarro.
La Dirección General de Carreteras ampliará el radio de varias curvas de esta vía para aumentar su seguridad y reducir el índice de siniestralidad, además se reforzará el firme y se colocarán nuevas señales verticales y horizontales, así como barreras de protección para motoristas. Guijarro explicó que “se trata de ensanchar la plataforma actual y mejorar la seguridad vial en sus curvas”.
De este modo, los casi 600.000 vehículos que circulan al año por esta vía, situada en pleno corazón del Valle de Ricote, disfrutarán de un trazado que repercutirá en la protección del manantial de ‘Las Pilicas’.
Para ello, la empresa adjudicataria cuenta con un presupuesto de 424.321 euros con el objetivo de “aumentar la seguridad del trayecto y reducir el tiempo de los desplazamientos, de tal forma que el trayecto sea más cómo para todos los usuarios”, añadió el director general.
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