Fuente: La Verdad
- La operación policial, dirigida desde Italia, se completó el lunes con otras nueve detenciones en la isla de Sicilia
- La Guardia Civil arresta en plena calle a un supuesto miembro de la 'Cosa Nostra' siciliana
El presunto mafioso Simone Castello no ha tenido la suerte de Bin Laden, aún en paradero desconocido para el común de los mortales. Castello, detenido el lunes por la Guardia Civil en Archena gracias a una operación dirigida por la policía italiana, veía la vida con calma y también con mucha confianza. Sus negocios de importación y exportación de frutas y hortalizas eran la máscara perfecta para despistar a los 'carabinieri' con una vida ficticia en pleno corazón de la Región de Murcia. Pero nada es para siempre. El lunes, mientras Castello pensaba en manzanas, ciruelas y naranjas, agentes de la Guardia Civil de Murcia acababan con su farsa y también con sus esperanzas de permanecer camuflado en la huerta de Europa. Castello no es Bin Laden y Archena no es Afganistán.
Simone Castello, uno de los mafiosos más buscados por los cuerpos de seguridad italianos, ha sido el único arrestado en España dentro de la 'Operación Crash', en la que agentes italianos ha detenido en la isla de Sicilia a un total de nueve presuntos mafiosos de la familia Bagheria. Todos ellos por su supuesta ayuda al capo local Bernardo Provenzano durante los 43 años que éste estuvo en búsqueda y captura trayendo de cabeza a las autoridades policiales de media Europa.
Según informan fuentes policiales sicilianas, a los 10 detenidos (Simone Castello y los otros nueve compinches) se les acusa de delitos de asociación de tipo mafioso destinada a la extorsión, posesión ilegal de armas de fuego y de registro ficticio de bienes.
Las mismas fuentes habían informado de que Castelo se había trasladado a vivir a Archena, donde cerraba operaciones de importación y exportación de fruta y verduras. Un portavoz de la Guardia Civil de Murcia aseguró ayer que la participación de los agentes de la Benemérita se había centrado simplemente en la captura del presunto mafioso y que no se había registrado o precintado ninguna empresa de la localidad murciana, ya que, al parecer, el supuesto delincuente no tiene oficinas en esta localidad.
Las diez detenciones se realizaron de forma simultánea el lunes y la de Simone Castello tuvo lugar sobre las 18.30 horas mientras caminaba por una centrica calle de la localidad murciana, según las mismas fuentes. Tal y como asegura la policía italiana, la operación responde a una investigación policial llevada a cabo entre 2005 y 2006 que alcanzó su punto álgido el 11 de abril de este último año, cuando fue arrestado el gran jefe entre los jefes de la 'Cosa Nostra', Bernardo Provenzano.
- La operación policial, dirigida desde Italia, se completó el lunes con otras nueve detenciones en la isla de Sicilia
- La Guardia Civil arresta en plena calle a un supuesto miembro de la 'Cosa Nostra' siciliana
El presunto mafioso Simone Castello no ha tenido la suerte de Bin Laden, aún en paradero desconocido para el común de los mortales. Castello, detenido el lunes por la Guardia Civil en Archena gracias a una operación dirigida por la policía italiana, veía la vida con calma y también con mucha confianza. Sus negocios de importación y exportación de frutas y hortalizas eran la máscara perfecta para despistar a los 'carabinieri' con una vida ficticia en pleno corazón de la Región de Murcia. Pero nada es para siempre. El lunes, mientras Castello pensaba en manzanas, ciruelas y naranjas, agentes de la Guardia Civil de Murcia acababan con su farsa y también con sus esperanzas de permanecer camuflado en la huerta de Europa. Castello no es Bin Laden y Archena no es Afganistán.
Simone Castello, uno de los mafiosos más buscados por los cuerpos de seguridad italianos, ha sido el único arrestado en España dentro de la 'Operación Crash', en la que agentes italianos ha detenido en la isla de Sicilia a un total de nueve presuntos mafiosos de la familia Bagheria. Todos ellos por su supuesta ayuda al capo local Bernardo Provenzano durante los 43 años que éste estuvo en búsqueda y captura trayendo de cabeza a las autoridades policiales de media Europa.
Según informan fuentes policiales sicilianas, a los 10 detenidos (Simone Castello y los otros nueve compinches) se les acusa de delitos de asociación de tipo mafioso destinada a la extorsión, posesión ilegal de armas de fuego y de registro ficticio de bienes.
Las mismas fuentes habían informado de que Castelo se había trasladado a vivir a Archena, donde cerraba operaciones de importación y exportación de fruta y verduras. Un portavoz de la Guardia Civil de Murcia aseguró ayer que la participación de los agentes de la Benemérita se había centrado simplemente en la captura del presunto mafioso y que no se había registrado o precintado ninguna empresa de la localidad murciana, ya que, al parecer, el supuesto delincuente no tiene oficinas en esta localidad.
Las diez detenciones se realizaron de forma simultánea el lunes y la de Simone Castello tuvo lugar sobre las 18.30 horas mientras caminaba por una centrica calle de la localidad murciana, según las mismas fuentes. Tal y como asegura la policía italiana, la operación responde a una investigación policial llevada a cabo entre 2005 y 2006 que alcanzó su punto álgido el 11 de abril de este último año, cuando fue arrestado el gran jefe entre los jefes de la 'Cosa Nostra', Bernardo Provenzano.
El enésimo golpe
Con la detención de estos diez supuestos mafiosos, las autoridades transalpinas asestan el enésimo golpe a la 'Cosa Nostra' desde que cayera, hace la friolera de 16 años, uno de los líderes más despiadados de esta organización criminal. Salvatore Riina -apodado 'La Bestia'- fue detenido mientras espera en su coche ante un semáforo (su chófer, Balduccio di Maggio, fue el informante en cuestión y varios de sus familiares fueron asesinados posteriormente por ello).
Simone Castello será trasladado a lo largo de esta mañana a Madrid para comparecer ante los jueces de la Audiencia Nacional.
¿Qué es la "Cosa Nostra"?
La 'Cosa Nostra' es una sociedad secreta criminal (mafia) siciliana desarrollada originalmente a mediados del siglo XIX en Sicilia. El 'Capi di tutti Capi' es el mayor rango dentro de esta mafia.
Se hospedaba en un lujoso complejo de apartamentos
Simone Castello había llegado a Archena hace unos tres o cuatro días y se hospedaba en un lujoso complejo de apartamentos turísticos, Archybal, situado en la carretera del Balneario, una zona del municipio en el que se concentran varios establecimientos hoteleros. Castello llegó a los apartamentos acompañado de un compatriota que está afincado desde hace tiempo en la localidad y que se dedica al negocio de la compra y venta de fruta. El presunto mafioso no llevaba coche, por lo que su compatriota tuvo que hacer las veces de chófer.
Según una de las empleadas del centro hotelero -que ayer no tenían conocimiento de la detención de su cliente- Castello era «muy simpático» y de comportamiento «completamente normal». Durante su estancia, no había recibido visitas. Castello dejó sin problemas que los empleados fotocopiaran su Carta de Identidad italiana, en la que figuraba con su nombre.
Ayer por la mañana, tras su salida del hotel, los empleados hicieron su habitación, en la que por la tarde aún se encontraba su equipaje y efectos personales. Eso sí, un vigilante privado custodiaba ya la puerta del complejo, a la espera de que la policía recogiera las maletas y las incorpore a la lista de pruebas. Lo que los empleados no saben es si los uniformados satisfarán la cantidad que Castello ha dejado a deber tras su corta estancia en Archena.
La detención por parte de agentes de paisano se produjo con absoluta discreción, sin conocimiento de las fuerzas policiales locales y sin que ningún vecino se diera cuenta siquiera de que algo estaba ocurriendo, pese a que fue en pleno centro del pueblo.
Según la agencia Ansa, el Tribunal Penal de Palermo ordenó intervenir bienes por unos 10 millones de euros en propiedades al empresario, incluyendo dos empresas agrícolas, un complejo inmobiliario, 30 fincas y una villa. También le impuso la obligación de no salir de Italia, que vulneró para ir a Archena.
Según una de las empleadas del centro hotelero -que ayer no tenían conocimiento de la detención de su cliente- Castello era «muy simpático» y de comportamiento «completamente normal». Durante su estancia, no había recibido visitas. Castello dejó sin problemas que los empleados fotocopiaran su Carta de Identidad italiana, en la que figuraba con su nombre.
Ayer por la mañana, tras su salida del hotel, los empleados hicieron su habitación, en la que por la tarde aún se encontraba su equipaje y efectos personales. Eso sí, un vigilante privado custodiaba ya la puerta del complejo, a la espera de que la policía recogiera las maletas y las incorpore a la lista de pruebas. Lo que los empleados no saben es si los uniformados satisfarán la cantidad que Castello ha dejado a deber tras su corta estancia en Archena.
La detención por parte de agentes de paisano se produjo con absoluta discreción, sin conocimiento de las fuerzas policiales locales y sin que ningún vecino se diera cuenta siquiera de que algo estaba ocurriendo, pese a que fue en pleno centro del pueblo.
Según la agencia Ansa, el Tribunal Penal de Palermo ordenó intervenir bienes por unos 10 millones de euros en propiedades al empresario, incluyendo dos empresas agrícolas, un complejo inmobiliario, 30 fincas y una villa. También le impuso la obligación de no salir de Italia, que vulneró para ir a Archena.
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